¡Hola a todos!
En esta ocasión también me saltaré la maratón de glosarios, porque hoy he estado en un seminario la mar de interesante, y quería compartir la información con todos vosotros, especialmente con los intérpretes y con todos aquellos cuyo instrumento de trabajo sea la voz.
Sí, hoy os voy a hablar de la VOZ, de cómo utilizarla y sobre todo, de cómo cuidarla bien.
¿Quién no ha sentido nunca un nudo en la garganta que nos ha impedido pronunciar una palabra a causa de los nervios o de la tensión del momento? Me apostaría lo que fuera a que todos nos hemos sentido así al menos una vez en la vida.
1. Cuando un punto de nuestro cuerpo está en tensión, muy probablemente, sin que nos demos cuenta, nuestra lengua se tensa, y por lo tanto, presiona la laringe. Así que, lo primero que tenemos que hacer, es distender este punto. ¿Cómo?
– Sacando la lengua apoyando la punta en la parte inferior de los dientes inferiores.
– Aplicando un masaje en la zona de la laringe
– Tragando saliva (que es lo más factible en el momento muchas veces, sobre todo si estamos ante un público).
2. Asimismo, la musculatura del cuello es importantísima, puesto que sujeta nuestra cabeza y presiona las vértebras cervicales. El problema es que cuando está en tensión, la musculatura se contrae y al final nos viene ese dolor tan atroz del que muchos nos quejamos (y me incluyo la primera). Para ello, podemos hacer ejercicios tales que:
– Frotarnos las manos para entrar en calor, aplicar ese calor haciendo un masaje en la musculatura (desde la base del cráneo) y pellizcar esa zona como si quisieseis separar la piel del hueso.
– Movimientos con la cabeza a los lados, de arriba a abajo o de rotación de la cabeza, que sueltan la musculatura del cuello.
3. También nos han hablado del músculo masetero, cuya hiperactivación produce dolores en la sien, en el oído o en la nuca. ¿Qué hacer si este músculo está demasiado contraído?
– Aplicar un masaje directo a la zona
– Presionar la zona y mantener esta presión (si no nos duele mucho).
– Abandonar hábitos ciertos hábitos, como: morderse las uñas, comer kikos, bolígrafos, zanahorias crudas o cualquier alimento que esté duro, ya que desgasta mucho esta articulación.
– Ir al médico si realmente nos duele muchísimo cuando presionamos esta zona, para que utilicemos una férula de relajación.
4. Por otro lado, la respiración es un aspecto fundamental, para la cual utilizamos nuestra musculatura abdominal, y concretamente el diafragma. Para ejercitarlo, bastan ejercicios como:
– Bostezar
– Estirarse
– SPLAT (Singers (and Speakers) Please Loosen Abdominal Tension), técnica para la distensión de la musculatura abdominal, que sirve para propiciar que la respiración siga siendo permeable a las distintas actividades, emociones y rasgos individuales.Podéis practicar repitiendo una misma sílaba («pa») sin respirar, hasta conseguir que no os ahoguéis. ¿Cómo es eso posible? El aire entra solo, aunque no nos demos cuenta si no tenemos el músculo contraído. Si nos ahogamos después de unos 10 o 20 segundos, significará que lo tenemos contraído y que tenemos que trabajar más este ejercicio.
5. Por último, tenemos que cuidar nuestros hábitos, intentando que sean saludables, como por ejemplo:
– Calentar antes de trabajar con la voz: darse palmadas por todo el cuerpo, estirarse, apretar y soltar los labios, sonreír sin enseñar los dientes, masticar, etc. Para calentar la laringe, podemos hacer el sonido «ng» imitando el sonido de una sirena de ambulancia, ya que esto permite estirar los pliegues vocales.
– Controlar si tenemos reflujo: acidez o vómitos frecuentes, que queman el tracto faríngeo y que da lugar a una voz rasposa.
– Inspirar por la boca para hablar o para cantar.
– Evitar tóxicos, como el tabaco o la inhalación de olores fuertes que puedan alterar la mucosa faríngea.
– Evitar productos deshidratantes, como la menta, el chocolate (yo soy de las adictas al chocolate, por lo que no me ha hecho ninguna gracia), el té, el café o el alcohol.
– Beber dos litros de agua al día.
– Hacer curas de hidratación dos veces al año (beber cinco litros de agua en tres días).
– Mantener una elasticidad corporal.
– Dormir bien.
– Ir una vez al año al otorrinolaringólogo o al foniatra.
¡Y hasta aquí la primera parte! Si os interesa más el tema, os dejo el enlace del blog de una profesora de la Escuela de Arte Dramático de Murcia, en el que explica con todo detalle todas estas ideas que acabo de mencionar. En la segunda parte hablaré más detenidamente de la expresión oral (o el arte de hablar), que también me ha parecido importantísimo y digno de mencionar. 🙂
Justo me acabo de apuntar a un seminario sobre este tema, me encanta la entrada, muy útil. Gracias
Cuando asistí al seminario, me di cuenta que resultaba muy útil ya que no solo se puede aplicar a un ámbito, sino a muchos distintos, así que puede resultar de utilidad a muchos profesionales como pueden ser profesores, intérpretes, actores o cantantes. ¡Gracias a ti por pasarte por aquí!
¡Me vienen genial estos ejercicios! De hecho, desde que hago interpretación, cuido mucho más mi voz y mi garganta (aunque yo vivo en un resfriado perenne que no termina de irse). Hoy, de hecho, me he impresionado al ver que me tapaba la boca con la bufanda para que no cogiera frío, ¡cosa que nunca había hecho!
Buena entrada, como siempre.
Muchos besos. 🙂
Me encanta saber que estos ejercicios te puedan resultar de utilidad, creo que la voz es una herramienta fundamental para la mayor parte de las profesiones.
Un fuerte abrazo, y nos vemos en poquitos días en tu tierra. 😉
Laeticia
Te felicito Laeticia, por esta entrada. hace un par de años que trabajo este tema en Perú con un locutor (un taller para intérpretes) y haz hecho un excelente resumen de toda la parte teórica. Debo comentar, sin embargo, que no estoy muy de acuerdo con inspirar por la boca, pues así, el aire no pasa por las fosas nasales y no se calienta, cosa que resulta perjudicial para las cuerdas vocales. La recomendación es inspirar por la nariz. ¡Bien por esta entrada! La comparto. Y gracias.
Muchas gracias, Daphne, por el comentario.
En el seminario nos explicaron que a la hora de hablar o cuando cantamos, debemos inspirar por la boca pero que cuando no lo hacíamos, lo mejor era hacer lo que tú dices: respirar por la nariz por los motivos que tú misma me dices. ¿La explicación? La profesional que nos impartió el seminario lo explicó de forma muy técnica, y por desgracia, no me quedé con los datos, así que desgraciadamente, no te puedo contestar a esto. Sin embargo, si te interesa, le puedo escribir para preguntárselo, y así tendrás una respuesta mucho más completa. 🙂
Un abrazo,
Laeticia
Muchas gracias por la entrada.
Yo todavía no he ejercido profesionalmente como intérprete, pero sí que he sido guía turística y profesora y es cierto que cuando tu instrumento principal de trabajo es la voz hay que cuidarla todavía más que en el resto de los casos (que también, al fin y al cabo todos los que la tenemos la usamos cada día).
Espero tu segunda parte. Cada día me sorprendo más de la cantidad de personas que son incapaces de dar una charla o hacer un exposición oral de forma adecuada y, aunque en esto intervienen muchos factores diferentes, esta claro que la proyección de la voz es fundamental.
Gracias a ti por el comentario. Ahora mismo estoy con un catarro de narices y estoy sin voz, teniendo que hablar en público mañana. Espero no tener que forzar demasiado la voz. Como tu dices, es fundamental.
¡Saludos!
Muchas gracias por la entrada y felicidades por el blog en general.
Soy estudiante de traducción e interpretación y siempre me ha preocupado el tema de la voz ya que soy chica y la tengo bastante aguda. Piensas que será un problema?
Muchas gracias.
Muchas gracias por el comentario, Laura.
Hasta donde yo sé, tener la voz más o menos aguda no afecta a los problemas de afonía, pero claro tampoco solo una experta en el tema.
Un abrazo.
Laeticia
Quiero decirles que este post, aunque pueda parecer un aspecto poco importante para muchos, es esencial en nuestra labor. En este momento he tenido que asistir a 20 terapias de lenguaje para aprender a usar la voz correctamente pues estaba sufriendo de una disfonía muy persistente y debilidad en la voz y el volumen. Mi labor como docente e intérprete se ha visto afectada, y comencé a ver dificultades para mi desempeño en el primer ámbito. Les recomiendo que tomen su voz en serio. Es nuestra herramienta de trabajo y requiere que hagamos en ella una inversión así como la haríamos en cualquier otro equipo o software para nuestro trabajo. Gracias por este post.
Estoy de acuerdo en todo lo que dices. Muchas gracias a ti por el comentario, Shelly.
Abrazos,
Laeticia
Hola Laeticia ! Me encanta la entrada, haces un resumen estupendo de las pautas vocales que deberían seguir todos los profesionales de la voz, entre ellos vosotros, los traductores, y sin embargo, muchas veces se desconocen. La voz también es mi ámbito de trabajo, como futura logopeda me interesa muchísimo el tema y me alegra saber que os preocupáis por vuestra herramienta de trabajo. Por cierto, no sé si por el nombre me has reconocido..pero fuimos compañeras en el instituto, ha sido una sorpresa encontrarte en este blog, porque lo vi en el muro de facebook de una amiga y no esperaba que fuera tuyo jejejej..
Cualquier cosa, ya sabes.
Un saludo.
Dasha 🙂
¡Hola Dasha! 🙂
Por supuesto que me acuerdo de ti, ¡vaya una sorpresa y qué alegría verte por aquí! 🙂 Muchas gracias por el comentario, me alegra ver que este tema es de interés a personas de otros ámbitos.
Ya sabes dónde encontrarme si necesitas algo. ¡Cuídate mucho!
Abrazos,
Laeticia